Servidor, que es un enamorado del que llaman deporte rey, se levantaba hace unos días con la noticia de que la Supercopa de España se disputaría en 2013 en China. Para aquellos que no estén muy puestos, es un trofeo que enfrenta al ganador del título de Liga con el campeón de la Copa del Rey, torneo habitual de agosto a doble partido y que da comienzo a la temporada venidera.
Pues bien, resulta que la Federación Española de Fútbol, con Ángel María Villar a la cabeza ha vendido la Supercopa de España al gigante asiático por 30 millones de euros y un contrato de 5 años. Parece que este señor no se ha puesto en la piel de los aficionados de un equipo de fútbol que sueñan con ver a su escuadra ganar un torneo que además tiene uno de los partidos en su casa, con su gente. Ahora dirán que en China hay muchos seguidores de este deporte...
El deporte del pueblo lo llamaban... ahora parece ser de unos pocos, por el elevado precio de las entradas que para nada está acorde a los tiempos económicos que vivimos y ahora por esto, ¿qué aficionado volará hasta China para ver a su equipo?
Tampoco es que los equipos hayan puesto mucha resistencia, podrían haber pensado en sus aficionados y oponerse a esta venta del fútbol español. Primero deslocalizaron empresas y ahora se llevan el fútbol...
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