Ellos son los tolerantes

Pronto  llega el 2 de enero, fecha muy importante en la gloriosa historia que en nuestras espaldas portamos. El fin de la reconquista, la expulsión del último reducto de invasores, todo ello en el comienzo de un gran año para esta nación, 1492. Cada 2 de enero, en Granada se festeja la toma de dicha ciudad por los Reyes Católicos, una fiesta que todos los granadinos acogen y celebran con entusiasmo.

Pero para darle 'gracia' al asunto siempre están los tontos de siempre. Los separatistas andaluces y grupúsculos de extrema-izquierda que año tras año no consiguen conciliar el sueño mientras se celebra con orgullo la toma de Granada. Desde sus webs y portales en internet bombardean a diestro y siniestro contra todo y contra todos, llamando fascista hasta a los que limpian la plaza. De todos es sabidos que nuestros amigos de la ultraizquierda son de lengua fácil y viperina, pues desde el mes de noviembre cargan contra los malvados fascistas y la fiesta de corte racista. 

¿Qué te puedes esperar de 4 tontos que no saben diferencias churras con merinas? Este año no iba a ser menos y continúan erre que erre con la supresión de la fiesta. Dicen, "es un genocidio que no respeta culturas". Desde la plataforma 'Granada Abierta' piden la ilegalización del festejo y el reemplazo por un tributo al hereje de Mariana Pineda. 

Lo gracioso del asunto es que los verdaderos agitadores que comenzaron esta absurda lucha contra su propia historia no eran ciudadanos ni de la provincia. 

Por mucho que les pese, el pueblo de Granada quiere a la Toma y no se deja ensuciar por la palabrería barata y el acuñamiento de fascista a todo lo que se mueve. La Toma se seguirá celebrando por mucha arbonaida que saquen.